El Universal, 7 de diciembre de 2002

Sabido es que, como consecuencia del incendio ocurrido en los muelles de La Machina en 1930, el Gobierno nacional contrató con la Frederick Share Corporation, compañía con asiento en Nueva York, la construcción de un moderno terminal marítimo sobre la isla de Manga. Por lo tanto, los rieles del ferrocarril debían ser conducidos hasta las nuevas instalaciones portuarias.

A continuación me permito transcribir de las “Memorias de Obras Públicas - 1930-1934”:

“Conexión férrea y puente. Para conectar los muelles con el Ferrocarril Central de Bolívar y con el de Cartagena - Calamar, se construyó una línea férrea de 554 metros de longitud, medidos desde el extremo Este del muelle marginal. Como esta línea atraviesa el Caño de Bazurto, fue necesario construir en él un viaducto, sobre pilotes de concreto, de 32 metros de luz, y a cada lado de él un relleno seco de caracoleja que descansa sobre un relleno hidráulico del mismo material, de 135.000 metros cúbicos, hecho por medio de un dragado en la bahía. El viaducto está formado por 24 pilotes de cemento reforzado de 0.41 x 0.41 de sección y de 50 pies de longitud; estos pilotes fueron hincados con un martillo ‘VULCAN’ número 1, hasta alcanzar una resistencia de 50 toneladas sobre la cabeza (...)”. Este fue el inicio del puente de Bazurto, construido en 1933 para dar paso al ferrocarril hacia el nuevo terminal marítimo.

En el decenio de los años 40 del siglo pasado, hubo necesidad de poner a trabajar una draga en el caño de Bazurto, por lo que cortaron el terraplén del lado de El Bosque para pasar la draga y adicionaron al puente de concreto uno de madera, por donde siguió pasando el tren.

Levantados los rieles del ferrocarril, en 1951, se concibió la idea de transformar el puente férreo en uno de mejor utilización que sirviera para el tráfico de vehículos automotores (automóviles, camiones, buses, etc.). Esta obra se llevó a cabo en los primeros años del decenio de los años 60 del siglo XX.

Con la conexión de Cartagena a las redes nacionales de carreteras, el puente de Bazurto se convirtió en factor importantísimo para el tránsito de los camiones de y para el interior del país. El kilómetro cero “0” de la carretera Troncal de Occidente quedó señalado a la entrada del terminal marítimo.

Durante el actual año de 2002, el Distrito de Cartagena marcha un ambicioso proyecto que algunos llaman “Vía de acceso rápido” y otros “Corredor de carga”. Esta obra, de magníficas proyecciones, debe financiarse mediante el recaudo de valorización y a través del cobro de peajes. El puente de Bazurto ha sido ampliado considerablemente y del lado de Manga se establecieron unas casetas recaudadoras para los vehículos que de El Bosque quieran entrar a Manga.

Algunos protestan, pues no están de acuerdo en que se pague un peaje por transitar de un barrio a otro de la misma ciudad. Yo quiero aclararles que lo que se está cobrando no es un peaje. Veamos cómo lo define el Diccionario Larousse: Pontaje o pontazgo. Derecho que se paga por pasar algunos puentes. De manera que no paguen el peaje, pero apresúrense a desembolsar el pontazgo, o no pasan.